De vueltas con las andanzas del gilipollas que usurpa la jefatura del estado al supuesto pueblo soberano, descendiente de esa familia real corrupta y degenerada que debe creerse que el total de los ciudadanos de esa cosa llamada España, son idiotas; o por lo menos lo suficientemente idiotas como para tragarse el cuento de su imparcialidad y su neutralidad política. Que el tipo ese sea imparcial políticamente hablando, es tanto como creerse que el P$OE es un partido republicano, socialista y de izquierdas, o que los de Vox son unos demócratas de tomo y lomo, sobre todo si el lomo es adobado. Que no tiene nada de demócrata ya nos lo demostró la noche del 3-O del 2.017, con su discurso beligerante, partidista, enfrentista y radical, propio de ese monarca absolutista y corrupto que corre por sus venas borbónicas. Con medio país preguntándose qué demonios está pasando realmente para que, lo que en cualquier país europeo a estas alturas ya se habría solventado con la formación de un gobierno de coalición, aun andemos con la incerteza de saber si Sánchez va a hacer su trabajo, que es formar gobierno, o va a devolver la patata caliente a los ciudadanos, en noviembre, con la convocatoria de unas nuevas elecciones, síntoma inequívoco de lo poco que le importan los problemas que acucian a la ciudadanía y que, todo su empeño, es quedar a bien con el poder que lo maneja como a una polichinela. La derecha no va a poyar a Sánchez, eso parece claro en principio a expensas de que al Rivera le dé un subidón de harina de otro costal, volviendo a maravillarnos a todos con un nuevo donde dije digo, dije Diego. Recordemos cuantos sapos se ha tragado más de un dirigente político en esa cosa llamada España, “por la gobernabilidad” del país, Jordi Pujol el “incarcelable”, incluido. Ya sé que esa palabra no existe; pero ya me habéis entendido, como sabéis por qué no veréis a papá Pujol entrando en la cárcel y, si no lo sabéis, preguntadle al emérito real corrupto. Así las cosas, solo le queda entenderse con los de Unidas-Podemos y, mal que le pese, con los nacionalistas. Curioso ¿no? Lo es, porque aquellos que tanto detestan a los nacionalistas, PP y C$, no apoyan con su abstención al P$OE, obligando a Sánchez a entenderse con los soberanistas porque con Unidas-Podemos no llega a la mayoría. Quizá es porque, en el fondo, tanto PP como C$ necesitan a los nacionalistas para tener un enemigo común al que enfrentarse y con el que sacar pecho-lata español, como única respuesta política que tienen para los españoles.
Entre tantas preguntas e interrogantes que despejar para aclarar el entuerto, un periodista de Público, Juan Carlos Escudier https://blogs.publico.es/escudier/2019/07/10/y-si-fuera-el-rey-el-que-impide-la-coalicion/?utm_source=facebook&utm_medium=social&utm_campaign=publico&fbclid=IwAR32V3sLhMOmG3zZkmwRZ7nVLPTPaMg3F_IJdT6aiso04CJ6XFidYhSFzQY ha lanzado una hipótesis que corrobora mis sospechas: que no es Sánchez el que se niega a formar un gobierno de coalición con la formación morada, ni son los barones del P$OE los que le presionan, porque estos detestan tanto a podemitas y a los nacionalistas como los de la derecha pero aman aún más el poder: sino que ha sido el destripaterrones ese de la Zarzuela el que le ha prohibido a Sánchez que Iglesias entre en el gobierno, porque prefiere otras elecciones a las que naturalmente la acémila real no se va a presentar, habida cuenta de que éste, Pablo, sí que parece republicano de verdad y aboga por reformar la ley, para que la jefatura del estado no se herede por la vía de un polvo, sino que se obtenga por las urnas. Ya conocemos, de sobras, la aversión que le tiene el pollo sin corona a todo aquel que ponga en cuestión su corrupta monarquía. Los catalanes lo sabemos muy bien. Como sabemos de lo que es capaz para combatir a los desafectos, entre otras cosas legitimar el “A por ellos, oé”, con un discurso que debería pasar a los anales de la historia como la antítesis de un discurso real de carácter moderador, conciliador y no enfrentista, o como permitir, sino acaso ordenar al TSJM, que prohibiera los símbolos y banderas republicanas por las calles de Madrid el día de su coronación, para salir posteriormente en la tele, con todo su cinismo, a decir que en España se respetan todas las ideologías políticas. En tu casa no sé; pero en la mía a eso se le llama ser un puto hipócrita. Evidentemente que los golfos afanadores del Ibex35 están con el monarca, como primer valedor y conseguidor de sus rapiñas, ya que acostumbran a viajar con el podrido monarca para sacar comisiones y beneficios de aquí y de allá, con los negocios que el corrupto borbón les procura con su sello real. ¿O es que creéis, de verdad, que tanto viajecito real acompañado de empresarios, lo hacen por el bien de España y los españoles, si lo que evaden de impuestos con su ingeniería fiscal, entre todos ellos, como ya relatamos aquí https://www.facebook.com/jose.varela.509994/posts/10220360477950175 supera nuestro PIB nacional, según los informes del Observatorio de Responsabilidad Civil Corporativa?
Cada uno es muy libre de pensar lo que le parezca; y yo pienso esto. Te guste más o te guste menos, es lo que hay: que cada día somos más los que abrimos los ojos y vemos. El argumento falaz para no formar gobierno con Iglesias de la falta de lealtad de los podemitas se sustenta en algo que el Pedrito esgrime para justificarse así mismo para vetar a Pablo en el consejo de ministros, porque ¿de dónde saca que a Catalunya haya que volver a aplicar el 155, si tiene intervenido el presupuesto autonómico catalán, tal y como lo tenía Montoro? Excusas de mal pagador. A eso suena y no a otra cosa. Claro que, tratándose de alguien sacado de la fábrica esa de republicanos monárquicos de Ferraz, no es de extrañar: son unos embusteros patológicos.
A más ver
MANTENERSE HUMANO 